viernes, enero 31, 2014

GOBIERNO REDEFINE LA PALABRA "LOGRO".


Es muy grave que un Presidente intente convertir su falta de autoridad y liderazgo en pequeños triunfos políticos con altos costos para el país que él mismo preside, porque, mientras él intenta subir uno o dos puntos en la encuesta Adimark, los grupos de presión traducen su accionar en incentivos para usar la fuerza.

Sebastián Piñera no esconde las ganas de volver a ser presidente de Chile. Su ambición no le permite otra cosa que ser Presidente. Esto no tendría nada de malo, si además de querer ser presidente de Chile, Piñera tuviese vocación por gobernar, lo que es muy distinto a ser mandatario. Gobernar implica muchos costos y pocos beneficios, y ser presidente es pura ganancia. Por ejemplo, durante el paro ilegal de trabajadores portuarios, el presidente Piñera se negó a aplicar la ley, porque aplicar la ley tiene costos de imagen y muy pocos beneficios.  Entonces, Piñera traspasó el costo a las víctimas del paro ilegal: Un millón y medio de pesos a cada portuario; impunidad total, y, “el gobierno va a compensar pecuniariamente a cada huelguista ilegal por media hora de colación diaria que no le otorgaron (ni tenían legalmente que darle) entre 2005 y 2014, lo que representará un millonario desembolso fiscal, pues en muchos casos alcanzará hasta cuatro millones de pesos por persona”, escribió en su blog Hermógenes Pérez de Arce, el mayor crítico de Sebastián Piñera.
Este tipo de actitudes del no-gobierno de Piñera ya no sorprenden a casi nadie. Seguramente porque su credibilidad tocó fondo cuando este desautorizó ante todo el país al ex ministro de educación, Felipe Bulnes el año 2011. Bulnes sufrió la toma de su ministerio, luego un grupo de indignados se tomó el congreso mientras él participaba en una comisión mixta de educación. Cuando la opinión pública rechazó los métodos de los “estudiantes”, Sebastián Piñera avaló sus prácticas violentas invitándolos a negociar a la Moneda. Se repite la historia, Piñera traspasa los costos a un tercero, en este caso, Felipe Bulnes.
El columnista Ascanio Cavallo diagnostica que el declive del gobierno de Piñera comienza con “el paro de Punta Arenas frente al alza del gas, donde el gobierno empezó negando y terminó cediendo todo”. Lo más relevante de este acontecimiento, es que además de ceder a las demandas por subsidios, el gobierno convirtió esta perdida neta para el país, en un logro de Piñera. Lo mismo ocurrió en Aysén, donde se envían fuerzas especiales desde Santiago, se aplica la ley de seguridad interior del Estado a 22 violentistas, y en cosa de días se revierte todo; el gobierno cede a todas las demandas y retira las querellas. Pérdida neta para Chile, pero un “logro” para el no-legado de Piñera; “El Presidente de la República, Sebastián Piñera” dice el sitio web del Fosis, “anunció que 20.000 familias de la Región de Aysén serán beneficiadas con el Bono Leña 2013, un subsidio para calefacción de $100.000 destinado a las familias más vulnerables de la región”.
Es muy grave que un Presidente intente convertir su falta de autoridad y liderazgo en pequeños triunfos políticos con altos costos para el país que él mismo preside, porque, mientras él intenta subir uno o dos puntos en la encuesta Adimark, los grupos de presión traducen su accionar en incentivos para usar la fuerza. A los grupos de presión no les interesa la aprobación del presidente, pero si ven que éste reduce todas sus decisiones a las encuestas y titulares en los diarios, es imposible que estos grupos no tomen ventaja de su debilidad, o como dicen los apologistas, “sus logros”.
Francisco J. Salinas B.

jueves, enero 30, 2014

EL PIÑERISMO DE BACHELET.

"Piñera y Bachelet quisieron que el núcleo duro de su gobierno estuviera formado por sus amigos. Sus jefes de campaña (los dos Rodrigos: Hinzpeter y Peñailillo) se transformaron en ministros del Interior... "

¿En qué se parece el gabinete recién nombrado por Michelle Bachelet al equipo ministerial con que Sebastián Piñera comenzó su gobierno en 2010? En todo.

Piñera y Bachelet quisieron que el núcleo duro de su gobierno estuviera formado por sus amigos. Sus jefes de campaña (los dos Rodrigos: Hinzpeter y Peñailillo) se transformaron en ministros del Interior. Los voceros de sus comandos fueron después los voceros del gobierno. Y también vemos cómo sus amigos políticos más cercanos (Arenas, Elizalde) tomaron los cargos que quisieron. Heraldo Muñoz, nuevo ministro de RR.EE., era de los pocos que tuvieron acceso a ella durante los años en la ONU. Todo queda en familia.

La prensa ha destacado la presencia de los partidos en el nuevo gabinete. Es verdad que hay 6 ministros PPD, 5 DC, 5 PS, 1 PC, etc., pero más allá del carné, ¿cuántos de los ministros importantes son realmente gente de partido? ¿Cuántos de ellos van por gusto a la sede partidaria, y no porque muy de tarde en tarde deben asistir a una reunión inevitable?

Las grandes figuras de los partidos que componen la Nueva Mayoría, esa gente que tiene experiencia, peso específico y un carácter fuerte para no dejarse "mandonear", están ausentes, como también sucedió en 2010. Quizá recojan una embajada, que los mantendrá alejados sin dejarlos resentidos, pero el mensaje que han recibido es que ya no ocupan un lugar en la mente y el corazón de Michelle.

En 2006, Michelle Bachelet nombró a los que podía, y tuvo que tragarse un gabinete que no siempre fue de su agrado. Ahora, poderosa e imprescindible, pudo nombrar a los que quiso: se dio un gusto que antes no podía permitirse. Piñera 2010 y Bachelet 2014 comparten idéntica convicción de que sin ellos su sector está perdido, se saben poderosos y lo hacen sentir.

También imitó a Sebastián Piñera en la mala práctica de sacar a parlamentarios del Congreso y nombrarlos en el equipo ministerial, como si en la Nueva Mayoría no hubiera suficientes figuras de renombre y capacidad como para formar varios gabinetes.

En "David Copperfield", Dickens alude a esa extraña sensación de haber ya vivido lo que tenemos delante, de haber estado rodeados por los mismos objetos y circunstancias. El acto del pasado viernes nos trajo esa sensación de déjà vu . Pero hubo una cierta novedad, porque su acto no significó una repetición del pasado concertacionista, sino una continuación del modelo del primer Piñera, un estilo que el actual Presidente ha reconocido que le trajo graves problemas.

Sebastián Piñera tuvo que corregir muchos de esos errores en la mitad de su gobierno. La duda ahora no es si Bachelet hará lo mismo, sino cuándo realizará el primer cambio de gabinete y, obligada por las circunstancias, deba hacer un lugar a los denostados partidos.

Con el reparto del resto de los cargos Bachelet no tuvo inconvenientes en mostrar ecumenismo. Nombró a una comunista en un lugar donde estará muy contenta y podrá desplegar su progresismo sin entrabar el funcionamiento político del gabinete. Aquí y allá puso caras nuevas, para dar sensación de cambio y mantener equilibrios de género, regiones y sensibilidades.

Hubo, sin embargo, una movida donde mostró su astucia política. Le entregó precisamente a una DC, Ximena Rincón, la Secretaría General de la Presidencia, es decir, la tarea de sacar adelante su programa político. La Democracia Cristiana fue el partido que más problemas tuvo para digerir algunos puntos del programa de la Nueva Mayoría que iban directamente en contra de su ideario. Con este nombramiento la neutraliza.

Pero Ximena Rincón no es una DC cualquiera, sino una particularmente díscola, con un fuerte carácter y posturas discordantes con los viejos cuadros de su partido: una suerte de Lily Pérez de su sector. Al tender la mano hacia una figura que había estado maltratada y se sentía herida, al rescatarla del aislamiento y hacerla entrar en su círculo íntimo, Bachelet gana su gratitud eterna. Con Enrique V, le dice a Rincón y sus más cercanos colaboradores: "Nosotros, los pocos, los felices pocos, la banda de hermanos". Olvida, sin embargo, que esto no es una familia sino un juego muy distinto, la política. Ya tendrá cuatro años para recordarlo.
 
Joaquín García Huidobro.
El Mercurio.

miércoles, enero 29, 2014

ANÁLISIS DE UN MILITAR ACERCA DEL CONFLICTO EN LA ZONA DE LA ARAUCANÍA.


Creo oportuno ofrecer a los lectores un análisis militar objetivo y profesional de la
situación de violencia que afecta a la Araucanía.
Lo que se lee en la prensa es una mezcla de verdades a medias y verdades
interesadas conducentes a juicios que desnaturalizan el real peligro que enfrenta nuestro
país.
No pretendo entregar una solución. Mi ánimo es exponer la realidad que enfrentamos,
avalada por la historia militar hasta la saciedad.
La historia es el único tribunal que jamás se equivoca aunque sus dictámenes
demoren generaciones.
No somos una excepción histórica y es más sabio escucharla que ignorarla.
Por otra parte ¿A quién podría proponerle una solución si nadie entiende o desea
entender el problema que tenemos? Enfrentamos una situación de violencia originada por
demandas étnicas cuya solución debió encausarse por cauces socio político y económico y
que históricamente no han sido escuchados o se han aplicado pseudo soluciones
manteniendo latente un volcán social.
Este manejo condujo a un grado de insatisfacción y frustración del pueblo mapuche
de tal magnitud que derivó en el caldo de cultivo favorito de las filosofías marxistas y no
pasó mucho tiempo en que grupos nacionales y extranjeros que las profesan reclutaron a
los más exaltados para “lograr por la fuerza lo que la ley no reconoce”
De acuerdo al desarrollo de los hechos, se han dado rigurosamente los pasos
clásicos que marcan las diferentes etapas de la guerra irregular urbana y rural hacia la que
nos encaminamos
Hubo una primera fase de adoctrinamiento y preparación de líderes ideológicos y
militares que hacen suyas las demandas desafiando a la ley y a las instituciones exigiendo
una solución pronta e integral.
Estas demandas “se venden” entre la juventud mapuche y no mapuche que, por su
naturaleza e inexperiencia, son proclives a solidarizar con estas “injusticias sociales
históricas”.
Apoyo desde el extranjero refuerzan doctrinaria y financieramente el movimiento.
La presión se extiende a las Universidades, se apodera de las redes sociales y las
reivindicaciones toman personalidad propia apareciendo en cualquier acto que convulsiona
la vida del país.
El problema de la Araucanía “se instala” en la prensa, en la política y en los hogares
pasando a integrar uno más de los “temas pendientes” de una clase política en permanente
competencia en las urnas, ámbito en que priman los objetivos personales y partidistas
sobre los intereses del país.
Se adoptan medidas en el ámbito social, financiero y policial cuya descoordinación e
improvisación conducen a fracasos que son hábilmente capitalizados por los agentes de la
agitación.
Ya están dadas las condiciones para pasar a la segunda fase.
El avispero está a punto: El tema es parte de la vida nacional, hay víctimas que
claman lastimosamente por redención y una maquinaria doctrinaria y organizativa que da el
vamos a la próxima fase: el terrorismo selectivo.
El terrorismo es, en esencia, provocar el terror para obtener objetivos que, supuesta
o ciertamente, son lícitos y la sociedad los niega.
El terrorismo considera justificado atropellar las normativas legales y sobrepasar los
derechos humanos por “sus objetivos superiores”
El terrorismo se siente protegido por las mismas leyes que quebranta y por la
maquinaria marxista que le da asistencia tanto dentro como fuera del país.
“Yo estoy dispuesto a dar, pero no a recibir” Se eligen objetivos que golpeen la opinión
pública.
Emboscadas y golpes de mano se desencadenan con precisión militar en una
campaña creciente que en nuestro caso aprueba su examen con el crimen de la Familia
Luchsinger.
Luego los hombres se sumergen, bajan periscopio y dan el tiempo suficiente para
que los organismos políticos y policiales reaccionen cayendo en el vacío porque la
insurrección se ha larvado.
Cuando el horizonte pareciera aclararse, el tema está en proceso de olvido y las
contra medidas parecieran haber tenido éxito el terrorismo se reagrupa y aplica dos o más
certeros golpes.
Emboscada a camiones, quema de inmuebles y me atrevo a anunciar la muerte de un
agitador mapuche que, por supuesto, se presenta como una vida inmolada por la mano
represora del gobierno.
Hasta ahora nuestro fenómeno transita por los caminos políticos y policiales.
La clase política, en vez de enfocar este problema como un desafío común como
chilenos, lo utiliza en una lucha suicida para atraer votos hacia sus intereses personales y
partidistas.
La transición entre dos gobiernos origina “un tiempo neutro” para pelotear el
problema al que viene.
Tiempo complementario a favor del terrorismo.
Hay que buscar un responsable para dar satisfacción a la opinión pública mediocre
que lamentablemente es la mayoría de los votos. ¡Carabineros!
Se les entregó la responsabilidad y han fallado. Ninguna autoridad se atreve a
reconocer que la situación ya está muy lejos de una solución policial.
Inteligencia, palabra clave del problema que fluye de la boca de autoridades, políticos,
periodistas y voceros. Ahí está el nudo del problema.
Lamentablemente muy pocos saben lo que esta palabra involucra.
Indiscutible, necesaria e imprescindiblemente la producción de inteligencia es
indispensable para combatir el terrorismo.
Permite arrebatarle la iniciativa y la libertad de acción, principios tácticos sin los
cuales no puede sobrevivir.
Pero producir inteligencia significa designar objetivos, planes de búsqueda de
información, medios de búsqueda de información y analistas de información que requieren
personal capacitado, equipamiento sofisticado y sobre todo protección y
encubrimiento legal.
La labor de inteligencia es un trabajo sucio porque debe penetrar e infiltrarse en el
campo de las miserias del ser humano, ámbito en que la ley imperante es la del más astuto,
del más inescrupuloso y en donde el golpe bajo, la traición y el engaño es el diario vivir.
¿Cómo podemos exigir a Carabineros que produzca inteligencia de calidad? si
cualquiera de sus miembros que en esta labor ensucie un dedo es dado de baja en 24
horas, llevado a los tribunales en donde la parcialidad es proverbial y crucificado por la
prensa antes que en el juicio lo declaren culpable, como es la costumbre.
Esta es nuestra realidad descarnada, la verdad verdadera y la triste realidad que
debería avergonzar a todos los chilenos ¿La próxima etapa? Seré muy breve. La violencia
escapa del ámbito policial.
Carabineros es lanzado a una lucha ilegal con las manos atadas a la legalidad.
Se les niega toda acción comprometedora en la acción de inteligencia.
Se les ordena responder con proyectiles de goma a los de guerra y sus medios se
dispersan en un dispositivo cada vez más vulnerable y en forma monstruosamente injusta.
Se les estigmatiza como responsables de todo lo que sucede.
Festín de la prensa. Se produce la desmoralización de sus filas.
No hay solución política porque unos no entienden el problema, otros porque no les
conviene entenderlos por razones políticas y muchos porque la sobrevivencia del
marxismo necesita estos escenarios.
No hay solución social porque la falta de autoridad no permite ver más allá de las
llamas de un incendio que bloquea las miradas.
Se desencadena definitivamente la “guerra de guerrillas” que desangró a Francia en
Indochina y Argelia, que desangró a los EE.UU. en Viet. Nam y actualmente desangra a
Colombia.
¿Llegaremos a esta fase?
La guerra de guerrillas es como un embarazo no deseado. Se aborta a tiempo o
tenemos que resignarnos a convivir con el chiquillo Evitar este alumbramiento es labor de
todos, despojándonos de nuestros intereses y futuro personal, de las diferencias del
pasado que aún no nos perdonamos, de nuestras luchas políticas actuales.
No nos permitamos esconder la cabeza en la arena cuando nos amenaza una
tormenta que nos da temor.
Imaginar sus efectos precisamente porque somos otra víctima del terrorismo que
paraliza la razón.

MIGUEL ALFONSO DOREN.
Brigadier Ejército (r)
(Tomado de Chile Informa N°1515).

lunes, enero 27, 2014

LA HAYA: FUENTEOVEJUNA FUE.

PINCHE SOBRE LA IMAGEN PARA VER MEJOR.

Ya lo sabíamos, algo que suponíamos nuestro no lo fue nunca o ha dejado de serlo. Y Perú supone que algo que en la práctica nunca fue de ellos ahora les pertenece, aunque los jueces de La Haya no se pronunciaron al respecto. Tal vez podríamos ir a la corte planetaria de la Vía Láctea a solicitarle que nos aclare las dudas que aún persisten en los peruanos, chilenos y en los jueces.

Según logro comprender, Chile no solo perdió el “pedacito” que ya no es nuestro porque nunca lo fue; claramente toda la franja de norte a sur desde las 80 millas hacia afuera nunca fueron chilenas, o ahora dejarán de serlo.
Algún día en alguna época venidera esas 120 millas lineales desde Arica hasta Punta Arenas podrán ser valiosas, y serán reclamadas por alguna potencia o por vaya a saber uno quien, en alguna corte internacional en nombre de la humanidad toda y los derechos de los pueblos. Algún día.

Ya sabemos la razón por la que ambos gobiernos nos advertían que el fallo que yacía inerte dentro de un sobre lacrado tendría que “implementarse”. Humala y Piñera son adivinos; el peruano adivinó que algo ganarían y el chileno adivinó que algo perderíamos. Ambos primeros ciudadanos de la nación son una especie de X-Men, con poderes adivinatorios y vista de rayos X capaz de leer sobres lacrados.

La otra alternativa es pensar que el fallo se “filtró” casual y lamentablemente, pero no creo, no podemos suponer ese tipo de cosas de jueces y políticos, como se les ocurre.

Conocer a las personas es tanto o más importante que conocer las leyes; por eso estaba tan seguro de lo que escribí durante estos últimos días. No era posible que don 24/7 quisiera repartir un éxito, y esa era la razón de mis sospechas. Piñera se dedicó durante el último par de meses a elucubrar formas de diluir su responsabilidad y repartir los costos de la derrota. ¿O no?.

Ya lo saben cabritos, fíjense bien este verano antes de meter las patas al agua de alguna playa chilena que tal vez sea peruana, y por qué no, algún día sea boliviana y se termine por cumplir el sueño de mico-mandante. Lleven el pasaporte en el traje de baño (por siaca).

Mientras tanto Piñera sigue tratando de convencernos a todos y convencerse a él mismo hasta el 11 de marzo, repitiendo la misma frase: “Fuenteovejuna fue”. 

Máximo.

domingo, enero 26, 2014

¿QUÉ GANAMOS EL 27/01/2014?


Un metro de tierra o uno de agua que nos quiten será una derrota para todos los chilenos” ALEXIS.

Nos han dado un aviso que ningún chileno desea que se lo den.

Cualesquiera que sea éste, no interesa, mientras las cosas continúen inamovibles, porque así lo determinó la historia hace más de cien años y lo ratificó hace sesenta años con un tratado que inventó un gran hombre de nuestra historia: don Gabriel González Videla.

Cualquier minusvalía de ese territorio será considerada como una usurpación para nuestra patria y no debemos ni podemos aceptarla, venga de donde venga, gústele o no a nuestros vecinos.

Con el mismo criterio podemos reclamar la Patagonia como territorio nuestro, que cedimos en el pasado por temor al temor que tenían los argentinos sobre nosotros.

Es hora que los chilenos levantemos nuestra vista para admirar lo que tenemos que conservar como nuestro legítimo patrimonio.

Nosotros no estamos discutiendo nada con el Perú. Son ellos los que pretenden parte de nuestro territorio, sea mar o tierra.

Nosotros no tenemos nada que ganar con el fallo de La Haya,
No queremos ni un grano de arena de las playas peruanas, ni queremos un metro de tierra de su querido Perú. Sólo deseamos conservar nuestras riquezas, que no han sido puestas en juego, y que no deben ser objeto alguno de reparto, porque en ese caso bien podríamos pedir muchas cosas que otros nos deben.

Esa es la posición que deben tener los chilenos sin excepción. Lo contrario es servilismo inaceptable para un país con la raigambre que tiene Chile.

Ni un litro de agua ni un metro de tierra podemos entregar sin obtener la debida reparación, cosa que La Haya no hará de ninguna manera.

Eso es todo.

Alvaro Puga.

GABINETE DE BACHELET: "CON LA VARA MUY ALTA".

Michelle Bachelet presentó su futuro gabinete ¿cuánto tiempo durará en funciones?.

Luego del traspié que supuso postergar el anuncio del jueves para el viernes, la mandataria electa, por fin, entregó los nombres de los veintitrés técnicos y políticos que asumirán como ministros, el próximo martes 11 de marzo.

Ella misma, destacó que "la lista de desafíos es grande" por lo que los llamó a "trabajar, trabajar y trabajar". Sin embargo, la primera designación, la del ministro del Interior, que recayó en Rodrigo Peñailillo, llama profundamente la atención sobre el criterio utilizado en esta selección. El ex jefe de campaña y quien fuera su jefe de gabinete durante todo su primer período no es un político de tonelaje. 

En particular y como Bachelet sabe, las suma de expectativas desencadenadas, los anuncios de movilizaciones estudiantiles, las llamadas movilizaciones sociales y el complejo escenario internacional que vive el país (una especie de estampida de elefantes), hacía aconsejable convocar a personeros con mayor experiencia.

En su primer mandato, Andrés Zaldívar, debió renunciar a Interior ( se alejó junto a otros tres secretarios de Estado); en su caso porque nunca se entendió con la gobernante ni comprendió sus "criterios" lo cual precisamente sirvió para definir el perfil de quienes ocuparían cargos de este calibre. Es la empatía la "cercanía" aquellas cosas que hacen a la dorada comodidad del poder.

A primera vista, el señor Rodrigo Peñailillo no calificaría, aunque claro, se trata de un juicio ex ante. Ahora en el caso de Defensa, que correspondió al DC Jorge Burgos, se trata de un político con amplia experiencia. Fue subsecretario de Guerra (93-96) y luego subsecretario del Interior. 

Ahora, el canciller Heraldo Muñóz, un hombre de la Concertación (perdón Nueva Mayoría) pasó los mejores años de su vida moviéndose en las paradisíacas oficinas de la burocracia internacional y del mundo diplomático. Viene de Naciones Unidas (ex embajador ante la OEA; subsecretario de Relaciones Exteriores y ministro secretario general de Gobierno con Lagos, luego embajador ante la ONU y más tarde jefe del PNUD de Naciones Unidas) y al parecer, se siente "contenido" en estas altas esferas.

En total, seis de los futuro ministros militan en el PPD cinco en el PDC, cinco en el PS, una en el PC, uno en el PRSD (José A.Gómez en Justicia y Williams en Minería cercana al radicalismo), uno en el MAS, un IC y tres independientes. Todo un equilibrio. Pero se necesitará algo más que eso para navegar en marzo. Según Patricio Melero, este gobierno deja "la vara muy alta" y que la administración Bachelet haría bien en dialogar con la oposición. En realidad deberá cuidarse de lo haga el partido Comunista, el que impondrá el ritmo político-social y dominará la agenda de las movilizaciones, con un pie en La Moneda y otro en Alameda. 

DespiertaChile.cl

sábado, enero 25, 2014

DESDE ARICA: UNA DECLARACIÓN NECESARIA.

LOS EX INTEGRANTES DE LAS FUERZAS ARMADAS DE ORDEN Y SEGURIDAD DE ARICA, ANTE LA PROXIMIDAD DEL FALLO DE LA CORTE INTERNACIONAL DE JUSTICIA DE LA HAYA, EMITE EL SIGUIENTE COMUNICADO.

EN Arica, a veintiún días del mes de Enero.

Como ex integrantes en retiro de las FF.AA  y de Orden de Arica, no podemos quedarnos 
indiferentes ante la proximidad del fallo de la Corte de Internacional de Justicia de la Haya, respecto del diferendo marítimo entre Perú y Chile, por lo tanto queremos dar a conocer el sentir de nuestro sector, 
ante los acontecimiento que se avecinan.

Históricamente podemos señalar que nuestros organismos encargados de la política exterior, no han tenido la capacidad y valentía de hacer respetar los tratados firmados con nuestros países limítrofes, otorgándoles a ellos la iniciativa para manipular e interpretar arbitrariamente los diferendos en su propio beneficio.

Por lo anterior, se hace necesario tener una mirada sobre el comportamiento histórico del desempeño de nuestra diplomacia. Si bien es cierto nuestro país nunca ha sido una nación con intereses expansionistas, 
las circunstancias de la época lo llevaron a participar de un acontecimiento bélico que nunca había buscado, producto del incumplimiento de acuerdos comerciales por parte de nuestros vecinos, que afectaron 
seriamente a nuestros intereses económicos y sociales. 

Una vez involucrados en esta acción bélica y terminada las acciones, mientras nuestros soldados, provenientes de diversas localidades de nuestra patria, reivindicaban nuestro territorio hasta los márgenes del río Loa y además conquistaban para nuestra patria territorio peruano, proporcionando a Chile grandes riquezas, mientras nuestros políticos parapetados tras los muros de la moneda, hacían entrega entre gallos y media 
noche de la Patagonia a la nación Argentina.

En otras palabras mientras la sangre derramada por nuestros soldados en el norte, se hacía entrega a nuestra patria de cincuenta mil Kilómetros cuadrados de territorio conquistado, nuestros políticos y gobernantes hacían lo propio, con más de un millón de Kilómetros cuadrados de la Patagonia a la Argentina, sin mediar 
tratado o laudo arbitral alguno, solo cesión voluntaria en aras de la “Amistad y Unión Latinoamericana”, en la cual solo nuestros políticos creen.

Terminada la guerra del pacífico que costó la vida y sangre miles de soldados, dejando desamparadas a sus familias, una vez más entraron en acción los ineficientes encargados de las relaciones exteriores, 
firmando tratados que por su poca claridad nos penan hasta hoy.

En el tratado de Ancón se estableció nuestro dominio de la ciudad de Tacna, quedando pendiente su posesión definitiva, para un futuro plebiscito, el que gracias a la astucia e inteligencia de la diplomacia Peruana, se fue 
dilatando hasta lograr que no se realizara, con ello dicha ciudad pasa definitivamente al Perú conforme lo establecido en el tratado de 1929, lo anterior una vez más por la falta de coraje e ineficiencia de nuestros políticos. 

Paralelamente se firma el tratado con Bolivia, dejando la Puna de Atacama bajo la jurisdicción de Chile, terrenos que secretamente Bolivia cedió a la Argentina, producto de lo anterior Chile accedió a someterse a un laudo arbitral, con la nación trasandina conformado por un delegado de cada país y un arbitro (embajador de E.UU en Argentina) con semejante arbitro, lógicamente perdimos dicho territorio, que por tratado con Bolivia era nuestro.

En la década del 70 La nación Argentina, reclama para sí la posesión de las islas Picton, Nueva y Lennox en el canal del Beagle, nuevamente fuimos a un Laudo arbitral ante El Reino Unido que falló a nuestro favor, pero éste fue desconocido y declarado nulo por Argentina.

El presidente de la época Capitán General Don Augusto Pinochet Ugarte, movilizó las FF.AA a la zona del conflicto, iniciando desde ahí una nueva mediación, que involucraba a la Santa Sede, cuya resolución fue la 
mantención de las islas en poder de Chile, a cambio de una modificación en los límites marítimos a favor de Argentina.

Qué diferencia con las actitudes históricas, respecto de este tipo de conflictos, donde los políticos no tuvieron el coraje, liderazgo y valentía para defender nuestra soberanía

Por último en el año 1994 nuestros políticos en forma inconsulta, deciden acudir a un laudo arbitral con Argentina para dirimir la Laguna del Desierto, la que una vez más se perdió por la incompetencia de nuestras
relaciones exteriores y gubernativas.

Esta entrega ominosa significa nada más ni nada menos, que un total de 1.100.000 Kmts2 ha sido prácticamente regalado a nuestros países limítrofes de nuestro territorio nacional, que al parecer las mentes de nuestros políticos que en democracia nos han gobernado, no tienen memoria para recordar nuestra 
historia y la sangre vertida de compatriotas, que entregaron sus vidas, defendiendo nuestra Patria.

Con tristeza podemos apreciar como los integrantes de las FFAA.; han entregado sus vidas y derramado su sangre, en conflictos bélicos, al que fueron arrastrados por la  clase política y que una vez vencedores en 
el campo de batalla, los señores políticos la pierden en el papel con tratados ignominiosos.

Para quienes hemos servido por toda una  vida en las Fuerzas Armadas y de Orden, radicándonos en esta amada ciudad, vemos con profunda decepción el posible despojo de territorio nacional, que con tanto 
sacrificio hemos defendido.

Nuestras aprehensiones se fundamentan en la falta de convicción y valentía de nuestros gobernantes, en la defensa de nuestro territorio, desde el gobierno anterior hasta el actual, donde parece que es más importante, no dañar las relaciones e intereses económicos existentes en el país vecino que la defensa del territorio nacional. 

Por último queremos hacer sentir nuestro más profundo rechazo, a la gestión histórica de los distintos gobiernos, en el manejo de las relaciones internacionales, que sistemáticamente nos ha significado pérdida 
de territorio nacional y ante un posible fallo adverso, que no se ajuste a derecho, llamamos a nuestras autoridades a agotar hasta las últimas posibilidades acudiendo a todas las instancias internacionales para 
revertir tal situación, de no tener solución, deberán asumir sus fracasos, el gobierno anterior y el actual, ante la ciudadanía.

Es por eso que los pensionados de las Fuerzas Armadas de Orden y Seguridad de Arica y Parinacota, le piden al gobierno actual mantener la voz firme, carácter fuerte y decidido, ya que la Patria está primero 
ante cualquier interés político, y económico o invocación en aras de una hermandad y Unión Latinoamericana que solo a las autoridades Chilenas les ha interesado conservar.

 FIRMAN:

CIRCULOS CONGÉNERES DE LAS FF.AA. DE ORDEN Y SEGURIDAD EN RETIRO DE ARICA Y PARINACOTA.

viernes, enero 24, 2014

CHILE-PERÚ: MATAR LAS EXPECTATIVAS.

Sebastián Piñera reafirmó que Chile "defenderá sus legítimos intereses" y que "va a cumplir sus obligaciones, pero también va a ejercer sus derechos".

Bienvenidos tales conceptos del mandatario, quien al efectuar un balance de la política exterior durante su administración, declaró que "en la aplicación del fallo de La Haya Chile va a cumplir pero también va a exigir que se cumpla el fallo del Tribunal de La Haya, lo cual significa que NO conocemos ese fallo"

Hablando ante el Consejo chileno para las Relaciones Internacionales, que preside el ex Canciller Hernán Felipe Errázuriz, Piñera sostuvo que esperamos lo que resuelva el Tribunal "con tranquilidad y sin triunfalismos" 

En realidad, eso del triunfalismo que se advierte en Perú, ha dado lugar a innumerables conjeturas. Y el llamado a embanderar las ciudades, del ex presidente Alan García, va en esa línea. Eso mientras el ministro Alfredo Moreno visitaba Arica, donde afirmó, con extrema liviandad, que en caso de una sentencia adversa para nuestro país, el perjuicio económico no sería tan grande.

Tales apreciaciones, formuladas por un autoridad de ese nivel, lejos de disminuir la tensión, dan la impresión, no obstante lo que precisó Piñera, que más de algo se sabe. Jorge Tarud previno al respecto señalando que llama mucho la atención la actitud de Perú en esta materia. Pero no solo el diputado del PPD enfatizó este tema. Raúl Sohr - otro hombre de izquierda -, expresó que el Tribunal, pudo, dar conocer los trazos gruesos de su resolución. Y esa sería la fuente. En ese sentido, Jorge Pizarro, el senador DC indicó en su momento, que no le sorprendería que ambos gobiernos manejasen algún antecedente al respecto.

No lo entiende así Paz Zárate, especialista en Derecho Internacional de la Universidad de Chile.

Zárate recordó que en 70 años la Corte jamás hizo trascender alguna resolución. Y que la solidez de la defensa de Chile ante los jueces, le hacen ver con cierto optimismo lo que conoceremos el próximo 27 de enero. Como un detalle. agregó que la pretensión peruana de fijar el límite no el Hito 1 sino en el llamado Punto Concordia (200 metros más cercano a la costa), la Corte no la puede acoger, simplemente porque su fijación data de 1920. Y en esa fecha, el Tribunal no tiene jurisdicción.

Como se puede advertir, versiones y explicaciones abundan en uno u otro sentido. Lo claro es que Michelle Bachelet cometió un error de enormes proporciones al aceptar la competencia de La Haya; y que Sebastián Piñera, prosiguió con la defensa de Chile, en los términos planteados, manteniendo los equipos de trabajo y sumando jueces para tal efecto, pero abriendo la política de "cuerdas separadas" como si Perú no hubiese hecho gesto inamistoso alguno hacia Chile.  Por lo tanto, ambos tienen una responsabilidad ineludible frente al país. Sobre todo porque ningún mandatario, ningún Presidente de la República, a la luz del artículo 5 de la Constitución Política de la República, puede ceder soberanía.

"La soberanía - dice la Carta Fundamental -, reside esencialmente en la Nación. Su ejercicio se realiza por el pueblo a través de un plebiscito y de elecciones periódicas, y también, por las autoridades que esta Constitución establece. NINGÚN sector del pueblo, ni individuo alguno puede atribuirse su ejercicio"

El gobierno de Sebastián Piñera, al citar al COSENA, buscó escudarse en esas autoridades y principalmente en el mando de las FF.AA. en circunstancias que antes, no buscó su parecer ni les informó adecuadamente sobre este asunto que hace a la soberanía de Chile. Y todo lo que no se hizo antes, como informar a la ciudadanía en general, y en particular a las FF.AA, en forma oportuna, y prácticamente matar las expectativas al respecto, hoy solo parece una maniobra de circunstancia para salvar la cara frente a la historia haciendo difuso el papel que le correspondió a cada uno: tanto al mandatario en ejercicio como a su predecesora y sucesora.

DespiertaChile.cl

miércoles, enero 22, 2014

LA FALSIFICACIÓN DE LA HISTORIA EN AMÉRICA LATINA Y LAS MENTIRAS DE LA IZQUIERDA.

Eran los años de plomo y muerte, de bombas indiscriminadas contra civiles inocentes y atentados por la espalda contra los miembros de los cuerpos de seguridad y las Fuerzas Armadas.

Asistimos en los últimos tiempos, sobre todo tras la llegada al poder de la izquierda en Argentina, Chile y Uruguay, a una revisión histórica sin precedentes acerca de lo que ocurrió en todo el continente en las décadas de los sesenta,  setenta y ochenta. Eran los años de plomo y muerte, de bombas indiscriminadas contra civiles inocentes y atentados por la espalda contra los miembros de los cuerpos de seguridad y las Fuerzas Armadas. Las bandas de carácter marxista, siguiendo el ejemplo de la Revolución Cubana (1959), abrazaron la lucha armada y vieron en la violencia revolucionaria, nacida del odio hacia la cultura occidental y los valores democráticos, la panacea salvadora a todos los males que supuestamente asolaban al continente.

En Argentina, por ejemplo, hubo numerosos grupos de carácter terrorista, aunque el mayor protagonismo se lo llevaron los crueles y temibles Montoneros, nacidos al calor y tolerante benignidad del movimiento peronista de entonces. Cometieron decenas de atentados y acciones terribles, causaron centenares de muertos y heridos y dejaron un dolor injustificable que aún hoy sangra en la sociedad argentina. Al que fuera presidente del país, el general Pedro Eugenio Aramburu, los Montoneros le secuestraron, en1970, luego le sometieron a una parodia de "juicio popular" en una inmunda "cárcel del pueblo" y después le asesinaron de un tiro en la nuca. Una vergüenza propia de cobardes y gente sin principios.

Más triste fue el caso del coronel Argentino del Valle Larrabure, al que también secuestró un grupo subversivo marxista, el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), en el año 1975. Fue mantenido en una mazmorra en las peores condiciones de vida durante un año y una semana, para a renglón seguido, después de haber padecido toda suerte de tormentos, ser torturado y asesinado por los "héroes revolucionarios". Más tarde, el gobierno del funesto Héctor Cámpora puso en libertad a los asesinos de Larrabure y el caso, como otros tantos, quedó en la más absoluta impunidad. 

Son dos casos nada más de los miles de hechos criminales perpetrados por las bandas marxistas que más tarde fueron derrotadas por el gobierno militar del Proceso de Reorganización Nacional (1976-1983), periodo hoy ignominiosamente olvidado y condenado por una sociedad que prefiere no conocer la historia reciente de su país en aras de aceptar la vulgata marxista. El "pago" que ha dado la sociedad argentina a aquellos  militares que arriesgaron sus vidas para traer al país la paz y la democracia ha sido la cárcel, el lento exterminio de un puñado de hombres valientes y heroicos que dieron su vida por la patria. Ya han muerto 223 militares en las mazmorras kirchneristas y otro millar  se pudre sin que nadie se acuerde de ellos.

LOS CASOS DE CHILE Y URUGUAY
También en Chile se han tergiversado los hechos ocurridos a partir del año 1970, en que Salvador Allende ganó unas elecciones presidenciales por un exigió resultado (36%), y se trata de presentar el país de entonces como una realidad idílica y paradisíaca. En definitiva, se intenta  convencer al mundo que la "vía chilena al socialismo" se desarrolló de una forma pacífica y democrática. Basta de mentiras. Los tres años de Allende fueron un desastre completo, se hundió la economía nacional, los atentados terroristas de los grupos de extrema izquierda se sucedieron casi a diario y si no es por la intervención del 11 de septiembre de 1973 Chile hubiera acabado en una guerra civil, en una matanza indiscriminada para dar rienda suelta a los más bajos instintos de una izquierda que quería tan solo el "poder total".

Allende, apoyado por Fidel Castro y todos los partidos comunistas del mundo, incluida la Unión Soviética, tenía muy claro el guión: convertir al moderno y desarrollado Chile en un país de la órbita comunista cayera quien cayese. Uno de los principales grupos que apoyaban a Allende era el Movimiento de la Izquierda Revolucionaria (MIR), una organización terrorista que incluso siguió cometiendo atentados atroces durante el desgobierno socialista. 

También Allende amnistió, en un gesto abyecto y que demostraba su miseria política, a los terroristas  de la Vanguardia Organizada del Pueblo (VOP), grupo implicado en el asesinato en atentado, en 1971, del ex ministro del Interior Edmundo Pérez Zujovic. Se calcula que entre octubre de 1970 y agosto de 1973, según el escritor Noberto Fuentes, entraron en Chile unos 4.000 fusiles de asalto AK-47 procedentes de Cuba y que fueron transportados en aviones civiles de Cubana de Aviación para ser entregados a los terroristas chilenos. Tan solo tras la salida de Allende de la presidencia, el país recuperó la normalidad y se encaminó por la senda del crecimiento y la prosperidad, herencia que después recibieron los civiles y que pagaron con la misma moneda que en Argentina: el encarcelamiento de numerosos militares y policías que habían estado en primera línea de frente contra la subversión y habían derrotado al terrorismo. Así hace las cosas esta derecha, como Sebastián Piñera, que ahora se niega a indultar a estos militares y hace la vista gorda ante los terroristas marxistas que se refugian en Cuba.

Historias muy parecidas se sucedieron en el Uruguay, donde los militares contribuyeron a la derrota de la subversión y evitaron que la Nación cayera en un modelo político parecido y fiel copia a la isla-prisión de Cuba. Los militares fueron llamados por el poder civil, en una intervención cívico-militar acaecida en el año 1973, para poner fin a la emergencia terrorista, facilitar la supervivencia de las instituciones políticas y evitar el caos. Luego, en 1985, entregaron el poder, como hicieron los militares argentinos dos años antes, de una forma civilizada y respetuosa a los civiles.

Pero nadie ya recuerda esos hechos y, al igual que en Argentina, la gente olvida que en la década de los 70 los Tupamaros habían convertido a la capital uruguaya, Montevideo, en un infierno y que pretendían hacerse con el poder por la fuerza para fundar un régimen comunista. Los militares que entonces se empeñaron en la lucha contra los terroristas marxistas hoy están en la cárcel y algunos civiles, como el ex presidente Juan María Bordaberry, que contribuyeron notablemente  al desarrollo de políticas tendentes a la supervivencia de la democracia, murió en el olvido, el oprobio y el repudio tan propio de esta época de manipulación, falsificación histórica y adulteramiento descarado de los hechos.

En Uruguay, al igual que en Argentina y Chile, los militares se convirtieron en el chivo expiatorio de toda una época para una izquierda rencorosa y vengativa que ha escrito la historia a su manera. Hoy un colectivo formado por 34 militares, ya muy mayores y en pésimas condiciones de cautiverio, se muere en las cárceles uruguayas. Las Fuerzas Armadas de estos países fueron capaces de ganar la guerra a la subversión marxista durante la Guerra Fría, pero no fueron capaces de ganar la batalla política. Tampoco han sido reivindicados por unos demócratas que prefieren mirar para otro lado antes que defender unos principios y valores firmes en pro de la libertad, la concordia y la democracia. La cobardía se impone, pero también la manipulación histórica.Vivimos en un mundo al revés.

Ricardo Angoso.
Sociólogo y periodista español.